martes, 21 de noviembre de 2023

LOS MORISCOS DE ZURGENA: VIVENCIAS Y EXPULSIÓN (1570-1610)

1. Reducción de los últimos moriscos sublevados

    El 23 de abril de 1570, don Juan de Austria decretaba en Santa Fe de Mondújar el Bando de Reducción de los moriscos (Bando de Santa Fe)(1). Como indicábamos en la entrada “Campaña del Almanzora y toma de Zurgena por Don Juan de Austria (1569-1570)”. las negociaciones de paz del Austria con los moriscos representados por el Habaquí no terminaron con la guerra, ya que el ala radical morisca, junto con los turcos interesados en mantener el conflicto, no reconocieron el acuerdo. Tras la muerte de el Habaquí a manos de Abén Abóo, don Juan rompió las negociaciones de paz(2). Desde este momento se produjo la guerra total a sangre y fuego en la Alpujarra. En esta se experimentó un renovado impulso guerrero donde el caos volvió a reinar, pues los moriscos que aceptaban lo tratado eran atacados: Moxcalán, que estaba instalado en Vélez de Benaudalla; el Muezin, en el área de Motril y Almuñecar; y el Picení de Berja, que animaba a la huida al norte de África, se convirtieron en un verdadero obstáculo para la paz. Con la entrada en la Alpujarra el 2 de septiembre de 1570 de don Luis de Requesens, nuevo capitán general del reino de Granada, los moriscos a pesar de estar atrincherados en los cerros, sufrieron de manera continuada una serie de asaltos cruentos, culminando en marzo de 1571 cuando Abén Abóo era asesinado a manos de los suyos. La guerra terminó así, si bien es cierto que muchos moriscos huyeron a la sierra, donde se convirtieron en monfíes organizados en cuadrillas que continuarían el hostigamiento contra los cristianos durante todo el proceso de repoblación posterior. Este fenómeno fue especialmente intenso en las tierras almerienses, donde sobresalieron monfíes como Francisco el Cacin, que asoló la sierra de Gádor y el rio Almanzora; García el Caizar, en los Filabres, y Alonso de Aguilar el Joraique, quien tuvo en jaque a las tropas cristianas desde la sierra de Gádor hasta la Axarquía almeriense(3).

MORISCOS DE GRANADA (C) Christoph Weiditz, 1529

2. EL PRESIDIO DE ZURGENA

    El 3 de abril de 1570 don Juan de Austria sale de Cantoria dirigiéndose río Almanzora abajo hasta llegar a Zurgena. A su llegada encuentra a nuestro pueblo despoblado, ya que los moriscos zurgeneros habían sido levantados entre el 18 y 19 de junio de 1569 por las tropas de el Maleh, y convertida nuestra fortaleza en presido entre el 17 y 26 de julio bajo las órdenes del monfí Farax Abén Farax(4). Desde Zurgena Farax inició un proceso de desestabilización y rapiña de los campos de Huércal y Lorca, que terminaría con la muerte el 23 de septiembre de los monfís de Abén Farax en la rambla de Guazamara, y la huida del capitán morisco a Purchena.
    Como decíamos, tras la muerte de los monfís de Farax nuestro pueblo se encontraba deshabitado, permaneciendo así hasta la llegada de las tropas de don Juan de Austria. En “Surgena de Aguilar” quedó una compañía de infantes y otra de caballos al mando de don Luis Ponce de León(2) capitán de caballos lorquino. Don Luis unos meses después al volver a Lorca, agradecido por salvar la vida en aquella campaña, dejó en su capilla del santuario de Ntra. Sra. de las Huertas “dos estandartes que ofreció (…) en reconocimiento del favor y ayuda que tuvo de la Virgen Santísima, invocándola en esta Santa Imagen en muchas batallas y refriegas de moros en la última rebelión del Reyno de Granada (…) de todas las quales salió victorioso”(5). Ponce de León, como indica Valeriano Sánchez, dejaría pronto Zurgena para volver a Lorca, donde lo encontramos en 1594 como regidor y capitán de esta ciudad, participando en el rescate de los lorquinos cautivos en Argel(6).
    Los presidios, como el de Zurgena, eran verdaderos fuertes solitarios habitados por soldados que dependían totalmente del exterior, y representaban en toda su precariedad la presencia continua de pobladores en una verdadera zona de frontera(7). Para que los soldados que quedaban en los presidios no se fueran, Requesens propuso comprar doscientos bueyes por cinco mil ducados, que después se les descontarían de sus pagas, y dárselos a los soldados con semillas y arados para que sembraran las tierras próximas a los presidios; después se les compraría trigo, y se autorizaría a que cuidaran los morales y a hacer seda(8).
    Opinamos como los autores de la “Historia de Zurgena” que algunos de los soldados del presidio de Zurgena debieron quedarse como pobladores, pero no don Luis Ponce de León que era lorquino y pronto volvió a su tierra. No debemos confundirlo con el homónimo, primo del duque de Arcos que murió en el peñón de las Guaxaras Altas de la Alpujarra entre el 26 de febrero y el 15 de marzo de 1569(9).

3. LOS MORISCOS DE ZURGENA

    Ya hemos hablado en anteriores entradas de la población de Zurgena en 1488: 360 habitantes (80x4,5) y 1495: 283 habitantes (63x4,5)(10). Pero ahora es interesante saber los que la habitaban poco antes de la rebelión morisca; según el censo fiscal del año 1561 aparece Zurgena con 82 vecinos moriscos (x 4,5 habitantes) = 369 personas(11), es decir, la población había aumentado 86 habitantes en 66 años, todo esto a pesar de las vicisitudes y calamidades pasadas: a saber, Las epidemias de peste de 1508, 1510, 1520-1521(12) y 1522(13), la de “modorrillo”(*) de 1522(12), las inundaciones de 1517(14), y sequías, plagas y malas cosechas de 1521(13) (dada la magnitud de estas, en 1536, según aparecen en las actas del consejo de Vera, se acordaron repartir 50 fanegas de trigo en Zurgena y otros lugares)(15); la sequía de 1548(16); junto a los casi continuos terremotos, especialmente los de 1529(17) y 1533(12).
    Once años después en un documento de Simancas de 1572 se da a Zurgena 80 vecinos(18): 360 habitantes, una ligera disminución. La cifra vuelve a aumentar en el “Censo de las provincias ordinarias y partidos de la Corona de Castilla” o de Tomás González, copia del “Libro del repartimiento que se hizo de los ocho millones… de las vecindades del Reino el año de 1591” a 82 vecinos pecheros(*)(19). Teniendo Zurgena y Arboleas 60 casas pobladas según la “Razón de las Pilas que hay en el Obispado de Almería…” en 1587(20). Es decir, la población de Zurgena durante el siglo XVI se mantendría casi constante en los 360 habitantes (80 vecinos).

CENSO DE TOMÁS GONZÁLEZ Pág. 88
(C) https://www.ine.es/prodyser/pubweb/censo_corona/Censo_Corona_F.pdf

    En la extensa bibliografía sobre los moriscos del reino de Granada, hemos encontrado referencia a varios de Zurgena:
- 1557. Los moriscos almerienses eran mayoritariamente analfabetos, pero una pequeña parte de ellos entienden y emplean el castellano, son los aljamiados(*). En Vera a raíz de la firma de los contratos de arriendo de pastos, se nos facilitan precisiones en dieciséis casos entre 1554 y 1558, siete son aljamiados, siendo uno de ellos de Zurgena, y nueve recurren al intérprete, uno también de ellos de Zurgena(21). Seguramente este era el trujamán(*) García Rami de Zurgena, que sería utilizado en Vera como traductor o intermediario entre las dos comunidades, castellana y morisca(22).
- 1562. Los moriscos propietarios de ganado o de colmenas recurrirán, como los cristianos, a la práctica de la trashumancia. En invierno, los animales pacen en las bajas tierras cálidas cercanas al mediterráneo y, en verano, permanecen en los prados de la sierra. En este caso, encontramos a Bernardino Fajardo, habitante de Zurgena, como garante de Diego Martínez, habitante de Chercos y propietario de ocho colmenas. En la zona de Vera, cuando era preciso, un morisco autóctono se convertía en garante de su correligionario autor de la transacción, y muy a menudo, acogía las abejas en su propio colmenar(23). Hay un dato de las colmenas que había en Zurgena en estas fechas: 1535: 6 unidades; 1555: 15 uds.; 1556: 14 uds.; 1557: 26 uds.; 1558: 41 uds. y en 1581: 43 uds. (incluidas las de Arboleas)(24).
- 1567. Entre los juzgados por el Tribunal del Santo Oficio de Granada (creado por Real Provisión el 7 de diciembre de 1526) entre 1550-1600, se encontraba el morisco de Curgena, Juan de Berrio, reconciliado(*) y con sambenito(*). Es curioso que de los 235 procesados en la segunda mitad del siglo XVI en la provincia de Almería, 194 fueron cristianos nuevos, es decir el 83%(25).
- 1569. Durante la sublevación de las Alpujarras los hombres marcharon a combatir, permaneciendo solamente en las aldeas y pueblos almerienses mujeres, ancianos y niños sin posibilidades de encontrar un trabajo remunerado que les permitiera salir adelante. Las huertas, cuidadas por las mujeres, resultaban el único medio de vida. Así una morisca de Antas, llamada María de Salas, se encaminó hacia Zurgena donde vivía su hermana Esperanza de Salas al cuidado de su padre anciano. Esta unida a otras tres zurgeneras, María la Macaelí, María Fajardo y María Laso resuelven dirigirse a las autoridades de Almería demandando ser hilanderas cualificadas, pero no obtienen respuesta. Por tanto, en mayo deciden dirigirse al Alcalde Mayor de Almería, haciéndole saber que conocen a la perfección el trabajo de la seda, y exigiendo ser examinadas como “maestras de la seda”. Veinte días después son convocadas a realizar el examen en Vera junto a los hombres de los pueblos vecinos. Ante los dos veedores nombrados por el alcalde mayor se examinan, siendo declaradas "habiles y sufiçientes"(26) las tres hilanderas moriscas de Antas y las cuatro de Zurgena(27).
    Lógicamente la fértil huerta de Palacés era cultivada por moriscos, desconocemos la cantidad de ellos que residían en nuestra localidad, pero de su labor nos han quedado infraestructuras hidráulicas como acequias, los olivos centenarios y topónimos como Las Moreras, etc.

3.1. Don Sebastián de Cueto, beneficiado de Zurgena

    Sin ser morisco, es destacable en el devenir de la historia del pueblo de Zurgena la figura de don Sebastián de Cueto, contemporáneo de la época y beneficiado(*) de nuestra iglesia en 1528. Desconocemos si D. Sebastián era de Zurgena, aunque parece que en esta fecha también residía en nuestra localidad su hermano San Juan de Cueto, lo que lleva a pensar que si lo era.
    Un caso interesante de estudiar lo representan los curas o beneficiados de pueblos de la comarca que arriendan las tercias o diezmos de sus propias parroquias. Pero si la participación del clero en los diezmos reales (las tercias) es importante, mucho más lo es en el arrendamiento de los diezmos eclesiásticos, los 7/9. A nivel del obispado almeriense son numerosos los clérigos que rematan rentas decimales: capellanes, beneficiados, curas y vicarios pujan y se adjudican un significativo número de rentas. Su ministerio eclesiástico los convierte en facilitadores del acceso de auténticas compañías al arriendo de diezmos: es el caso de Sebastián de Cueto, nuestro cura(28). Así en 1528 entre las cartas de obligación otorgadas ante el escribano público de Almería, aparece una de don Sebastián, beneficiado de nuestro pueblo, que con su hermano como fiador obtiene los 6/9 de los diezmos de Zurgena, y el Excusado(*) de Cantoria y Partaloa(29)(**). Así en este año de 1528 don Sebastián obtiene la nada despreciable cantidad de 10.600 mrs; 3.550 mrs. de los 6/9 de los diezmos de los cristianos nuevos de Zurgena pertenecientes al Obispo, 10.050 mrs. de los 6/9 correspondientes a los diezmos de los cristianos nuevos pertenecientes al Cabildo y 6.000 mrs. de los Excusados de Cantoria(30).
    En los años 40 del siglo XVI, don Sebastián ha escalado en la jerarquía eclesiástica, ejerciendo su apostolado como beneficiado y vicario de la villa de Serón, señorío del duque de Escalona. Pero nos interesa su actuación como exponente de los intereses del clero en el control de sus rentas. Cueto se especializa en el arriendo de los diezmos del ganado forastero que pasan los inviernos en los templados campos almerienses. De sus importantes fiadores deducimos que es sólo la cabeza visible de una compañía dedicada al negocio de los arrendamientos de rentas: en 1552, después de una fuerte puja, consigue arrendar todos los diezmos del ganado forastero pertenecientes a la Iglesia (7/9) por un valor de 113.172,5 mrs.; pero arrienda, además, los 2/9 reales (tercias) por un importe de 26.140 mrs. Es decir, monopoliza todas las rentas del medio diezmo del ganado forastero por un valor de 139.312,5 mrs. (a excepción de las tercias de cristianos nuevos, de escasa cuantía). Pero la operación se dirige desde la ciudad de Vera, donde firman sus fiadores, tres importantes personajes de la sociedad veratense del momento: los hermanos Mellado, Manuel y Bartolomé, este último regidor de la ciudad, y el propio escribano de número y del cabildo Alonso de la Cadena.
    Sebastián de Cueto participó también en otros arrendamientos de diezmos del levante almeriense, junto con la compañía veratense(31).
    En Zurgena, donde no había cristianos viejos desde 1500, los moriscos pagaban 6/9. Este se dividía en cuatro partes; para el obispo 1/4 parte, las otras tres partes para la parroquia, con las que se hacían diez partes, seis partes para el beneficiado, una para el sacristán, y las tres restantes a la fábrica de la parroquia para limpieza y conservación(32).
    La actuación del clérigo Cueto se mueve entre su ministerio religioso y el mundo de los negocios. Así debió seguir en su parroquia de Serón hasta la rebelión de los moriscos. Llama poderosamente la atención que terminara siendo ahorcado por los moriscos, junto al vicario Ginés de Espín (beneficiado y mayordomo de las iglesias de Serón, Armuña y Lúcar) en las almenas del castillo seronés el 16 de julio de 1569. “La herencia martirial fue enarbolada como instrumento de ascenso social”, patente de ennoblecimiento y riqueza de los descendientes(31).
(**) El excusado eclesiástico: Aunque los dos autores consultados(28y29) coinciden que en 1528 se le concedió a don Sebastián Cueto el Excusado de Cantoria, no parece cierto y debió de ser otro tipo de contribución, ya que este impuesto fue creado años después en 1567 y se comenzó a aplicar en 1571 durante el reinado de Felipe II. Es posible que se refirieran al Subsidio creado en 1523 durante el reinado de Carlos I o a otras contribuciones anteriores no demasiado estudiadas(33).

EXPULSIÓN DE LOS MORISCOS
(C) Gabriel Puig Roda, Museo de Bellas Artes de Castellón

4. La expulsión de los moriscos

    La expulsión de los moriscos llamados de paces, se llevó a cabo por etapas para evitar la histeria colectiva, así los primeros en salir fueron los del Albaicín granadino que lo hicieron a finales de junio de 1569 hacia Andalucía Oriental y la Mancha, se continuaría con la salida de los moriscos de la vega granadina en marzo de 1570 hacia Almagro y campo de Montiel(34).
    En la actual provincia de Almería se calcula que hacia 1560 había entre 53.000 y 55.000 habitantes, repartidos en 13.119 familias, de las cuales 11.710 eran moriscas, y 1.409 cristianas viejas. Es decir, casi un 90% de la población era morisca(35). 50.000 moriscos, repartidos entre los pueblos de toda la provincia, excepto Vera y Mojácar que eran enteramente cristianos viejos, y Almería, Fiñana, Níjar, Purchena y Vélez Blanco que eran comunidad mixta(36).
    El 28 de octubre de 1570 Felipe II tomó la decisión de decretar la expulsión de todos los moriscos del reino de Granada, con ella se abre la puerta a la salida generalizada de todo el estado(37). Los moriscos se debían reunir en las parroquias de lugares y villas, y de allí se conducirían el primero de noviembre a una de las 7 zonas de concentración: Ronda, Málaga, Granada, Guadix, Baza, Vera y Almería(38). Según Luis de Mármol, en la orden del 28 de octubre se fijaba la salida de los moriscos de Guadix, Baza y río Almanzora para que fuesen por Chinchilla y Albacete a la Mancha, al reino de Toledo, a los campos de Calatrava y Montiel, al priorato de San Juan, y por toda Castilla la Vieja hasta el reino de León(39). Deberían salir desde los puntos de reunión en largas columnas de exiliados escoltados por soldados, andando cada día unos 20 km.(40), los del río Almanzora, Sorbas, Lubrín y Bédar se reubicaron en la zona de Toledo y Córdoba; en Albacete los de los Vélez y parte del Almanzora; y los del río Andarax y Alpujarra en Sevilla(41) en las galeras de Sancho de Leyva el 21 de diciembre(37).
    En Vera se calcula que se reunieron unos 3.000 moriscos del valle del Almanzora, aunque posteriormente se ha elevado la cifra a 6.000, y estudiando las proporciones antes del levantamiento se puede redondear hasta los 13.000 moriscos. En un principio estaba previsto que fuesen embarcados y enviados a Sevilla, pero después hubo un cambio de planes y se dirigieron a varios lugares de Castilla(40). Salieron de Vera el 7 de diciembre de 1570, pasando por Lorca hacia el exilio castellano, llegando a Albacete el 21 de diciembre, aunque desgraciadamente no llegaron todos, el crudo frio del invierno, el hambre y las enfermedades los diezmó y solo llegó un 21% aproximadamente(42).
    Con la expulsión, la comarca del Almanzora - Filabres pasó de 2.662 vecinos (13.648 hab.) en 1561 a 1.319 (5.276 hab.) en 1591, la mayoría cristianos viejos y moriscos conocedores, esclavos, encomendados, niños menores de 10 años y viejos(41).

4.1. EXPULSIÓN DE LOS MORISCOS DE ZURGENA Y PALACÉS

    Como ya hemos visto los moriscos de Zurgena habían sido sublevados en junio de 1569 por las tropas de el Maleh y llevados con ellos quedando nuestro pueblo deshabitado(4), dejando incultivadas las 875 tahúllas de regadío, las 800 fanegas de secano y los 1.500 olivos, y su producción anual de 100 onzas de simiente y 250 libras de seda, que tenía Zurgena por entonces(43). Posteriormente se estableció en Zurgena el capitán Farax Abén Farax con sus monfís, continuando despoblada a la muerte de los rebeldes en los campos de Pulpí(44). Con la toma del Almanzora por don Juan de Austria, los moriscos zurgeneros que fueron llevados a Serón, Purchena o Cantoria, se dispersaron por la sierra de los Filabres o bien acabaron siendo apresados por los castellanos.
    Realmente hay mucha confusión con el lugar de salida y llegada de los moriscos de Zurgena y de todo el Almanzora y Filabres.
    En primer lugar, algunos historiadores consideran que nuestros moriscos fueron de los primeros del río Almanzora en salir exiliados hacia la zona occidental de Andalucía y de la Mancha. Así lo demuestra la relación de moriscos asentados en Antequera (Málaga) en un recuento de 1573: 2 de Zurgena, 1 de Urrácal, 2 de Tíjola, 3 de Serón, 5 de Purchena, 1 de Olula del Río, 1 de Lúcar, 1 de Çagalayala (sic) y 1 sin precisar(45).
    Otra parte considera que se dirigieron a la parte de la Mancha, así nos hablan en la “Historia de Zurgena”, describiendo que el primer proyecto de salida de los zurgeneros y el resto del Almanzora y Filabres, estaba previsto entre el 15 y 20 de septiembre de 1570 a cargo de don Miguel Moncada, pero sufrió un retraso, fijándose la nueva salida para el 31 de octubre, para embarcarles en las galeras del comendador don Gil de Andrade en la playa de Vera (Garrucha) dirección a Sevilla. Con este propósito don Miguel Moncada encerró a los moriscos en las iglesias, dividiéndolos en dos grupos. El grupo de los zurgeneros lo componían 1836 moriscos(46), que fueron enviados a Almería(47) junto a los de Arboleas, Albox, Oria, Antas, Huércal-Overa, etc. Los de Zurgena y Arboleas sólo estaba compuesto por 69 moriscos(46), y de ellos eran zurgeneros aproximadamente 50(48). El otro grupo formado por 1.182 moriscos de Serón, Tíjola, Sierro, etc. fue guiado a Vera(47).
    Finalmente viendo que las galeras no llegaban se decidió que partieran a pie dirección a la Mancha a cargo de don Gaspar Hurtado de Mendoza. Los moriscos fueron distribuidos en columnas de entre 1.000 y 1.500, divididos en escuadrones de 500, cada columna llevaría un comisario con 200 infantes y 20 de a caballo. La salida se produjo el 7 de noviembre de 1570(46), llegando a Albacete el 21 de diciembre(42), para ser llevados finalmente al obispado de Cuenca y ser repartidos por los pueblos. En la documentación del Archivo de la Diócesis de Cuenca encontramos las declaraciones del zurgenero Diego de Morales, declarando las vicisitudes que sufrieron en la guerra(46).
    Otros autores indican que los moriscos del Almanzora fueron divididos y llevados a Guadix y Vera, de donde saldrían de uno y otro lado hacia Albacete y Córdoba. De Vera saldrían 8.000 moriscos dirección a Albacete al mando de don Pedro de Padilla con 860 infantes y 150 jinetes, llegando 6.300. Y también de Vera saldrían dirección a Córdoba 885 musulmanes, llegando 471(47).
    Como hemos podido comprobar, como mínimo, llegaron moriscos zurgeneros a Antequera y Cuenca, pero desconocemos su número y si salieron de Vera, Almería o Guadix. Incluidos entre los moriscos zurgeneros suponemos que irían los de Palacés, pero también existe la posibilidad de haber sido incluidos junto a nuestros vecinos de Overa y Huércal.

MAPA EXPULSIÓN DE LOS MORISCOS
(C) https://grupo.us.es/encrucijada/la-expulsion-de-los-moriscos-del-reino-de-granada-en-el-siglo-xvi/

5. La desolación tras la expulsión

    Acabada la rebelión en el Almanzora, los cristianos viejos iniciaron una fase de caza y captura de personas y bienes moriscos de forma indiscriminada, donde se practicó por ambos bandos la técnica de la “tierra quemada”, es decir el incendio de mieses, destrucción de molinos y almazaras, robo de ganado, etc. Con la salida de los moriscos las acciones de rapiña y apropiación se vieron acentuadas, por tanto la Corona consciente de estos abusos de los cristianos viejos, se apresuró a dictar la Real Cédula de 24 de febrero de 1571 donde desposeía oficialmente de todos los bienes a los musulmanes y se apropiaban para la monarquía(49), esta Real Cédula no era otra cosa que la expropiación forzosa de bienes por razones políticas(42). De este modo los cultivos y viviendas de Palacés quedaron vacías y pasaron a manos de la Corona en previsión de repoblarlas.

6. Expulsión definitiva de los moriscos de España

    El 19 de mayo de 1579 el Rey Felipe II mandó que se confeccionase una relación del número de moriscos existentes en la ciudad y el reino de Granada, la relación fue enviada por don Pedro de Castro desde Granada el 31 de enero de 1580, indicando que la población en Vera y su tierra era de 96 pobladores(50). Aunque nos parece una cantidad ínfima para la extensión del territorio.
    El 26 de enero de 1580 en una Cédula se aboga por la expulsión de los moriscos del reino de Granada con la obligación de que retornaran a los lugares castellanos, donde habían sido avecindados a partir de 1570. La expulsión de 1584 afectaría a muchos moriscos los que, desde 1570, habían vivido en el reino de Granada sin haber sido molestados de manera especial, como eran los citados moriscos sujetos a administración, los seises y oficiales. Vincent estima el número de moriscos residentes en el reino en 1580 entre 10.000 y 15.000 personas, de los cuales se expulsaría a unos 3.500 en 1584(51).
    Pero según parece, numerosos moriscos pudieron burlar las expulsiones de 1570 y 1584, una estrategia de supervivencia parece haber sido camuflarse entre colectivos marginados, como los gitanos o esclavos berberiscos(52).
    Finalmente Felipe III, el 9 de abril de 1.609, decidió la deportación de los moriscos de España. La expulsión comenzó por Valencia, realizándose los preparativos en secreto. Tras la expulsión de los moriscos valencianos se realizó la de los de Aragón en 1610. En los reinos de León y Castilla la tarea fue más compleja, puesto que estaban mucho más dispersos. Como consecuencia de esto, el proceso fue mucho más extenso en el tiempo y duró tres años más, de 1611 a 1614, lo que trajo consigo que algunos consiguieran eludir su salida y pudieran permanecer en España.
    Tan pronto se produjo la deportación morisca, Felipe II ordenó una repoblación general del reino de Granada con el fin de suplir el vacío demográfico ocasionado, lo que supuso el fin definitivo de la Almería musulmana y morisca, y de su cultura. Los repobladores cristianos viejos que venían de todos los rincones de la Corona echaron raíces aquí y son la base cultural de la actual tierra almeriense(53).

    Se inicia así la repoblación por cristianos viejos de nuestro pueblo… pero esta se desarrollará en otra entrada.

BANDO DE EXPULSIÓN DE LOS MORISCOS DE ARAGÓN 1610
(C) https://www.escrituraydocumentos.com/1610-bando-expulsion-de-los-moriscos/

VOCABULARIO

(*) ALJAMÍA / ALJAMIADO (R.A.E.): Entre los antiguos musulmanes habitantes de España, lengua de los cristianos peninsulares. Texto morisco en romance, pero transcrito con caracteres árabes / Que habla la aljamía.
(*) BENEFICIADO (R.A.E.): En la Iglesia Católica, presbítero o clérigo que goza de un beneficio eclesiástico. BENEFICIADO ECLESIÁSTICO: Oficio sagrado o espiritual al que la autoridad eclesiástica ha adjuntado el derecho perpetuo de percibir las rentas de los bienes de la Iglesia.
(*) EXCUSADO ECLESIÁSTICO (R.A.E.): Dicho de un diezmo, que se pagaba por parte de la casa mayor de dezmera de cada parroquia a la Real Hacienda en vez de a la Iglesia.
(*) MODORRILLO / MODORRILLA (1): Enfermedad pestilente y contagiosa que cursaba con alienación de la mente y alteración de los sentidos interiores / peste.
(*) RECONCILIADO (2): Persona que era vehementemente sospechoso de herejía.
(*) SAMBENITO (R.A.E.): Capotillo o escapulario que se ponía a los penitentes reconciliados por el tribunal eclesiástico de la Inquisición.
(*) TRUJAMÁN (R.A.E.): Persona que aconseja o media en el modo de ejecutar algo, especialmente compras, ventas o cambios. INTÉRPRETE: Persona que explica lo dicho en otra lengua.
(*) VECINO PECHERO (R.A.E.): Vecino obligado a pagar o contribuir con pecho. PECHO: Tributo que se pagaba al rey, al señor territorial o cualquier otra autoridad.

- (R.A.E.) Diccionario de la Lengua Española. Real Academia Española. https://dle.rae.es/
- (1) Acontecimientos que han sucedido en el mundo. Relación de los naufragios, calamidades, desaventuras y miserias de Teruel. Concepción Villanueva Morte y José Luis Castán Esteban. Fuentes Históricas Aragonesas, 60. Instituto Fernando el Católico CSIC. Excma. Diputación de Zaragoza. 2012. Página 251.
- (2) Ritual para la reconciliación de herejes del Tribunal de la Inquisición de Granada. Antonio C. Molinero Espadas. Archivo Teológico Granadino, 50. 1987. Página 334.

BIBLIOGRAFÍA

(1) La rebelión de los moriscos en tierras almerienses. Carlos Villoria Prieto y Valeriano Sánchez Ramos. Instituto de Estudios Almerienses. Colección Historia n.º 71. 2020. Página 90.
(2) Campaña del Almanzora y toma de Zurgena por Don Juan de Austria (1569- 1570). Palacés Histórico. 2023.
https://palaceshistorico.blogspot.com/2023/11/campana-del-almanzora-y-toma-de- zurgena.html
(3) Ibídem. La rebelión de los moriscos… Páginas 93-94.
(4) La rebelión morisca en el Almanzora y el levantamiento de Zurgena (1568- 1569). Palacés Histórico. 2023.
https://palaceshistorico.blogspot.com/2023/10/la-rebelion-morisca-en-el-almanzora- y.html
(5) El providencialismo en la guerra morisca de Granada. Valeriano Sánchez Ramos. Anuario de historia de la iglesia andaluza XV. 2022. Paginas 350-351.
(6) Cristianos lorquinos cautivos en Argel a finales del siglo XVI: El terrible asunto de los “rescates-ventas”. Los rescates concertados de antemano. Melchor Guerrero Arjona. Clavis n.º 11. 2021. Página 19.
(7) Ibídem. La rebelión de los moriscos… Página 98.
(8) Historia de Zurgena. A la historia desde tu historia. José García Gallego, Josefina Valera Tudela y Pedro Segura Cano. Arráez Editores. Colección Investigación n.º 2. 1994. Páginas 118-119.
(9) Sanctus Franciscus Borgia. Quartus gandiae dux et societatis jesu Praepositus generalis tertius V 1569-1572. Matriti Typis Gabriels López del Horno. 1911. Páginas 47-48.
Segunda parte de la Historia y grandezas de la gran ciudad de Sevilla. Licenciado Don Pablo de Espinosa. Officina de Iván de Cabrera. Sevilla 1630. Páginas 90-91.
(10) 1488-1501: Organización administrativa, judicial y militar tras la conquista. Zurgena en el Corregimiento de Vera. Palacés Histórico. 2023.
https://palaceshistorico.blogspot.com/2023/07/1488-1501-organizacion administrativa.html
(11) Los moriscos de Antas (Siglo XVI). Carmen Rodríguez-Gerschwitz. Axarquía revista del levante almeriense. Año VI, N.º 6 verano 2001. Arráez editores. Página 31.
(12) Anotaciones cronológicas para la historia de Almería (1480-1600). Juan Grima Cervantes. Almería y el reino de Granada en los inicios de la modernidad (S. XV- XVI). Arráez Editores. Colección Investigación n.º 1. 1993. Páginas 310-312.
(13) Historia inaudita de España. Pedro Voltes. Círculo de lectores. Edición de 1992. Página 261.
(14) Galdo y Muñoz, héroes de la caridad en las inundaciones de 1879 en Huércal- Overa. Juan Alonso Resalt. Axarquía revista del levante almeriense. Año VII, N.º 7 verano 2002. Arráez editores. Página 102.
(15) Los Almerienses del siglo XVI. Historia General de Almería y su Provincia. Tomo VIII. José Ángel Tapia Garrido. Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Almería. 1989. Página 157. Archivo Municipal de Vera. Actas del Concejo de 1531-1541. Fol. 111.
* Ibídem. Historia de Zurgena... Página 83.
(16) Ibídem. Anotaciones cronológicas… Página 314.
(17) Terremotos en Granada (Siglos XV-XVI). Edificación y sismicidad. Manuel Espinar Moreno, Juan José Quesada Gómez y Juan de Dios Morcillo Puga. Arráez Editores. Colección Investigación n.º 3. 1994. Página 92.
(18) Almería musulmana. II. Vida y Cultura. Historia General de Almería y su provincia. Tomo VI. José Ángel Tapia Garrido. Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Almería. 1989. Página Página 18. Archivo General de Simancas: CC 4ª, leg. 2201 fol. 12 vto.
(19) Censo de población de las provincias y partidos de la Corona de Castilla en el siglo XVI. Tomás González. Imprenta Real. Madrid 1829. Página 88.
(20) Ibídem. Censo de población de las provincias… Página 172.
(21) 50.000 moriscos almerienses. Bernard Vincent. Coloquio Almería entre culturas. Instituto de Estudios Almerienses. Departamento de Historia. 1990. Página 505.
(22) El río morisco. Bernard Vincent. Universidad de Valencia. 2006. Página 170.
(23) Ibídem. El río morisco. Página 38.
* Ibidem. 50.000 moriscos almerienses. Página 502.
(24) La fiscalidad concejil sobre los abejares trashumantes en la tierra de Vera (Almería) durante la época morisca. Julián Pablo Díaz López. Tiempos modernos, 16. 2008. Páginas 14-15. Archivo Municipal de Vera L-947.
(25) Represión inquisitorial de los moriscos almerienses durante la segunda mitad del siglo XVI. Joaquín Gil Sanjuán. Coloquio Almería entre culturas. Instituto de Estudios Almerienses. Departamento de historia. 1990. Páginas 539-540 y 547.
(26) La industria de la seda en Almería: Un caso insólito de trabajo femenino. María Isabel Jiménez Jurado. Revista de humanidades y ciencias sociales del IEA, 16. 1998. Páginas 161 y 163.
(27) El trabajo de mudéjares y moriscos en el reino de Granada. José Enrique López de Coca Castañez. VI Simposio Internacional de Mudejarismo. Teruel 16- 18/09/1993. Actas. 1995. Página 118.
(28) Clérigos arrendatarios de impuestos. El obispado de Almería en contexto ibérico. Antonio Muñoz Buendía. Sharq al-Andalus, 23. 2019-2021. Páginas 555 y 563.
(29) Ibídem. Historia de Zurgena... Página 131.
(30) Ibídem. Clérigos arrendatarios de impuestos... Página 563.
(31)  Ibídem. Clérigos arrendatarios de impuestos. Páginas 555 y 556.
(32) Ibídem. Historia de Zurgena... Página 132.
(33) Impuestos sobre la renta de los eclesiásticos: El subsidio y excusado (Diócesis de Sevilla, mediado del siglo XVII). José Julián Hernández Borrego. Revista Española de Historia de la Contabilidad n.º 7. 2007. Páginas 99-100.
(34) La rebelión de los moriscos… Página 99.
(35) Ibídem. 50.000 moriscos almerienses. Páginas 489-490.
(36) Almería en la edad moderna. Memorias del tiempo. La Historia de Almería. Francisco Andújar Castillo y Julián Pablo Díaz López. La Voz de Almería. 1998. Página 160.
(37) El II Marqués de los Vélez y la guerra contra los moriscos 1568-1571. Valeriano Sánchez Ramos. Revista Velezana, Ayuntamiento de Vélez Rubio, Centro Virgitano de Estudios Históricos y Ayuntamiento de Berja. 2002. Páginas 200-201.
(38) Ibídem. La rebelión de los moriscos… Página 101.
(39) El valle del Almanzora durante el Islam (y Suflí al fondo). José Acosta Montoro. Arráez Editores. Colección Investigación n.º 5. 1995. Página 253.
(40) La repoblación de Olula del Río en el siglo XVI. José Domingo Lentisco Puche. Instituto de Estudios Almerienses y Ayuntamiento de Olula del Río. 1991. Páginas 98-100.
(41) Ibídem. La repoblación de Olula del Río… Páginas 99-100.
(42) Serena: Pueblo morisco. Sus tierras y su gente en el S. XVI. Carmen Rodríguez-Gerschwitz. Axarquía, revista del levante almeriense. Año II. n.º 2. 1997. Página 7.
(43) Ibídem. Los Almerienses del siglo XVI. Páginas 76 y 96.
(44) Las peñas de Palacés y el cerco de Vera: 25-09-1569. Palacés Histórico. 2021.
https://palaceshistorico.blogspot.com/2021/08/las-penas-de-palaces-y-el-cerco-de- vera.html
(45) Los moriscos esclavizados de la serranía de Ronda y del área malagueña y los mercados de esclavos de Andalucía, 1569-1573. Rafael M. Pérez García y Manuel F. Fernández Chaves. Actas del II Congreso Internacional de historia de la Serranía de Ronda. 2019. Página 321.
(46) Ibídem. Historia de Zurgena... Páginas 122-123.
(47) Ibídem. El valle del Almanzora durante el Islam… Páginas 256 y 257.
(48) Los Muñoz, otra larga familia zurgenera. Domingo Muñoz García. Libro de Fiestas de Zurgena 1995.
(49) Ibídem. La repoblación de Olula del Río… Páginas 95 y 100-101.
(50) Vélez Blanco: el marqués, los cristianos viejos y los moriscos (1570-1610). Dietmar Roth. Comprender la expulsión de los moriscos de España (1609-1614). Bernard Vincent. Seminario de estudios árabo-románicos. Universidad de Oviedo. Vol. 2. 2020. Páginas 128-129.
(51) Ibídem. Vélez Blanco: el marqués, los cristianos… Página 138.
(52) Ibídem. Vélez Blanco: el marqués, los cristianos… Página 142.
(53) Ibídem. La rebelión de los moriscos… Páginas 99-102.

                    © ANDRÉS SÁNCHEZ DOMÍNGUEZ 2023

viernes, 10 de noviembre de 2023

CAMPAÑA DEL ALMANZORA Y TOMA DE ZURGENA POR DON JUAN DE AUSTRIA (1569-1570)

    En nuestra entrada “La batalla de Palacés: 12 de noviembre de 1569”(1), relatábamos los hechos de principios de noviembre con el intento morisco de tomar Oria y la respuesta lorquina con el combate de Cantoria y la retirada hacia Arboleas y Zurgena, que terminaría con la victoria murciana en Palacés. Desde entonces la guerra dejó momentáneamente el Almanzora y se centró en el altiplano granadino.
    Mientras tanto, Felipe II preocupado por el alargamiento de la guerra, decide relevar a los marqueses de los Vélez y de Mondéjar por sus escasos resultados prácticos, sustituyéndoles por el duque de Sessa en las Alpujarras y por don Juan de Austria en la zona oriental(2).

1. El cerco de Galera y la destitución del marqués de los Vélez

    En la parte occidental, Galera había caído el día 7 de noviembre de 1569 en manos moriscas, fracasando Huéscar en su intento de liberarla; esto obligó a Felipe II a enviar a su hombre de cámara don Luis de Ayala con 400 hombres a Baza para hacer frente a Galera. Más tarde, el día 20 se sublevaría Orce y al día siguiente los moriscos intentan tomar Huéscar. Estas acciones convencieron al marqués de los Vélez, que continuaba en la Calahorra, a salir de esta e intervenir en la zona granadina. Don Luis pensó salir del Cenete el mismo día 21, pero una gran tempestad de agua y nieve le obligaron a retener su salida hasta el 23, llegando a Baza este mismo día con un ejército de 1.000 infantes y 200 a caballo.
    Pero el marqués no se apresuró por llegar a Galera, sino que acampó en Baza restableciendo el poder de sus parientes los Enríquez y controlando el presidio de Caniles para evitar un asalto morisco desde Serón. Por fin en los últimos días de noviembre con 4.000 hombres y 200 caballos se dirigió a Galera iniciando su sitio. Pero los ataques del de Vélez no tuvieron éxito, ya que la falta de artillería le llevó al fracaso; perdiendo en las tres primeras semanas la mitad de sus tropas.
    Felipe II decidió que el marqués ya no era necesario en este campaña, ordenando a su hermanastro don Juan de Austria (1547-1578), capitán general de Granada, que saliese a campaña el 29 de diciembre dirección a Baza; y a don Luis de Requesens, comendador mayor de Castilla, que tomase artillería y aprovisionamiento en Cartagena y se dirigiese también a Baza.

DON JUAN DE AUSTRIA
(C) Anónimo. Oleo hacia 1575 © Museo del Prado

    El Fajardo hizo un último intento de continuar en la contienda volviendo a asaltar la plaza de Galera el 30 de diciembre, pero fracasó de nuevo. El día 1 de enero de 1570 don Juan llegó a Baza(3) con los tercios de Italia compuestos de 8.000 infantes, 500 caballos y varias piezas de artillería(2), anunciando al Fajardo su próxima visita. Esta se produciría el 18 de enero en el alcázar de Huéscar, donde don Juan le indicó al Fajardo que quedada destituido; el de Vélez levantó inmediatamente el cerco a Galera, llegando a Vélez Blanco el día 19 de enero(3).
El de Austria se parte luego / a Galera que está alzada, / dejando gran campo al Duque, / que queda en el Alpujarra. / A Huéscar llegó Su Alteza, / donde el de Vélez estaba, / y al que se holgó de ver, / porque era mucha su fama”(4).
    El 24 de enero las tropas de don Juan intentaron tomar Galera, pero fue un estrepitoso fracaso. Entre tanto, el marqués envió el día 30 al beneficiado Martín Falces Ategui con 90 hombres desde Oria a Cantoria para sacar ganado vacuno y cabrío, y llevarlo a Oria, lo que permitió momentáneamente la pacificación del Almanzora.
    El 3 de febrero don Juan recibe la orden del rey de pacificar los caminos señoriales con Murcia, molestados por los guerrilleros monfís de Ponce en Huércal y de Diego Abendali y sus moriscos de Vélez Rubio. La acción de coordinación de las tropas velezanas y lorquinas la llevó a cabo Falces Ategui, dando muerte a Ponce y a Abendali.
    Finalmente el día 7 de febrero don Juan tomó la fortaleza de Galera, despejando el paso al Almanzora(5).

2. Comienzo de la campaña en el Almanzora

    Don Juan volviendo a Baza da la orden de marchar sobre el Almanzora, enviando una patrulla de reconocimiento con 170 lanzas y 50 arcabuces al mando de don García Manrique. Caminó esta compañía por la noche de Caniles a Serón, pero el guía escapó y tuvieron que dormir en Fuencaliente. Al día siguiente continuaron la marcha sufriendo una emboscada por causa de unas vacas en el río Almanzora, volviendo por la sierra.
    Don Juan parte de Baza el día 17 de febrero, se detiene en Caniles, saliendo a las nueve de la noche para Serón con 2.000 arcabuceros y 200 de caballería(6).
    Las operaciones sobre Serón se iniciaron el 18 de febrero, pero la comitiva sufrió un nuevo descalabro, ya que murieron buen número de soldados y el ayo de don Juan, don Luis Quijada a manos de los moriscos de el Maleh y el Habaquí que habían llegado río arriba desde Purchena, obligándoles a retirarse a Caniles(7). Los moriscos le habían tendido una trampa con el alboroto de las guapas moriscas, haciéndoles entrar en la población para saquearla, mientras que ellas se encerraban en el castillo. El Maleh entró primero con la caballería para rematarles con la arcabucería(6) al grito de “¡Ahora pagaréis lo que hicisteis en Galera!(8).
    El 23 de febrero don Pedro de Deza escribía a Felipe II aconsejándole expulsar a los moriscos de la zona; el rey le hizo caso dando la orden el día 24, ordenando el destierro de los moriscos de las hoyas de Baza y Guadix(9).
    Partiendo de Caniles el día 27 con 8.000 infantes y 500 de caballería(10), el ejército de don Juan comandado por don Lope de Figueroa se presenta en Serón(8), tras una dura batalla, el 28 de febrero cae su fortaleza(7), permaneciendo en ella hasta el 9 de marzo cuando llegaron los bastimentos de Jaén(10).
    Mientras, el rey había decretado la expulsión de los moriscos de los Vélez; y comunicado al marqués del próximo refuerzo de Oria. Este se realizó el día 12(9).

CASTILLO DE SERÓN
(C) turismoseron.es/blog

    El mismo día 9 de marzo el Austria llega a Tíjola la Nueva, situando su real en la huerta; pero esta no caería hasta el 22 cuando la artillería hizo desalojar la fortaleza de Tíjola la Vieja a los moriscos del capitán turco Caracax, terminando por asolarla(11).
    El hecho de reforzar Oria fue interpretado por los del señorío como vía libre para robar y esclavizar a los moriscos, pero don Juan no lo permitió y cuando el día 25 de marzo salía de Tíjola a Purchena, dejando a cargo de esta a Diego de Leiva, no flaqueó en castigar estos abusos, sobre todo porque estos hechos perjudicaban los contactos de rendición con el nuevo general del Almanzora, Hernando el Habaquí una vez muerto el Maleh(9).
    El mismo 25 de marzo D. Juan envía a don García Manrique a ver la situación de Purchena, pero ante su llegada los moriscos que no habían escapado, se rindieron(12). El Maleh enfermo, posiblemente envenenado, había ordenado desalojar la fortaleza(10). Más tarde llegaría el Austria a poner su real en la huerta de Purchena, donde comenzaron a llegar moriscos de todo el Almanzora a reducirse(12).
    De Purchena pasa a Cantoria el 27 de marzo, encontrándola desalojada, ubicando en las afueras don Juan su real el día 28. Pero el Austria sufrió en sus mismas carnes la deserción y la falta de avituallamiento que tanto daño le hizo al de Vélez, retrasando el avance por la comarca. Desde Cantoria el general dispuso la expulsión de los moriscos del señorío velezano y de otras villas murcianas(9).

3. TOMA DE ZURGENA POR DON JUAN DE AUSTRIA

    El 3 de abril de 1570 don Juan levanta el campamento de la fortaleza de Cantoria dejando a cargo del presidio a Bernardino Quesada, para dirigirse río abajo a Zurgena(9) “Surgena de Aguilar” según Luis de Mármol(13). Una vez llegados a nuestro pueblo, al que encontraron deshabitado, don Juan dejó a don Luis Ponce de León con una compañía de infantes y otra de caballos, partiendo a las cuatro de la mañana hacia el río Aguas. Pasan por las “bocas del Almanzora” en Overa y entran en la tierra de Vera. Los moriscos de las poblaciones río abajo de Cantoria se habían rendido a los capitanes que precedían al ejército unos días antes, cansados de vagar hambrientos por los campos(14).
    Mientras, el rey paralizaba la expulsión de los moriscos de los Vélez el día 6 de abril(15).

PLANO CASTILLO DE ZURGENA
(C) Alberto Castellón Sánchez del Pino. Castillos y atalayas del Almanzora. 2017. Página 290

4. Las negociaciones de paz

    Todos al fin y al cabo deseaban la paz, pero ninguno daba los pasos necesarios. Pero el personaje más importante de esta paz sería Hernando el Habaquí. Este era el alguacil de Alcudia, hombre de buen juicio y valeroso; se vió obligado a unirse a la revuelta en junio de 1569 cuando le avisaron que iba a ser encarcelado. A la muerte de el Maleh, Abén Abóo le nombró general de los moriscos con armas, viniendo al Almanzora cuando don Juan de Austria preparaba la toma de Serón.
    Por parte cristiana el encargado sería don Hernando de Barradas, vecino de Guadix y amigo de el Habaquí. En enero se pone en contacto con el morisco diciéndole que podían obtener el perdón del rey si trabajaba en la reducción de sus correligionarios. La primera entrevista se realizó el 15 de febrero en Aldeire, un lugar del marquesado de Cenete. El Habaquí en marzo estaba en Purchena, subiendo el 8 a socorrer a Serón, escapando de esta para refugiarse de nuevo en Purchena. Desde Tíjola el mensajero del Austria, Francisco de Molina le envía una carta a Hernando para tener una reunión, contestándole este que la tendrían en el río Almanzora. La primera reunión se realizó el día 12, produciéndose dos más el 18 y 22, esta vez con Francisco de Córdoba. En estas el morisco pedía que se perdonase a todos y les devolvieran a sus mujeres e hijos; ante lo cual los cristianos le respondieron que no se trataba de capitulaciones, sino de ver las condiciones de entregar las armas y suplicar misericordia. Una vez vuelto a Purchena, los turcos le trataron de traidor saliendo para las Alpujarras; detrás salieron los alpujarreños, y él mismo una vez tomada Tíjola la Vieja.
    El 29 desde las Alpujarras el Habaquí escribió a Barradas relatándole que en el Almanzora la rendición estaba acordada, pero que no volvieron a contactar con él(16).

CAMPAÑA DE DON JUAN DE AUSTRIA
(C) Valeriano Sánchez Ramos. El II marqués de los Vélez y la guerra contra los moriscos 1568-1571. 2002. Página 194

5. Fin de campaña de Don Juan

    Desde Zurgena don Juan inicia la campaña por los Filabres, Alpujarra y Andarax. El día 4 de abril la comitiva llegó al río Aguas(17) situándose el mismo día en Lubrín, desde este don Juan envía a García Manrique y Juan de Espuche a Tahal para reforzar la retaguardia. El día 5 salen para Sorbas(18) donde llega el 6, deteniéndose hasta el 15 de abril(17). Deja en el presidio de Sorbas al capitán Peñaroja, pasa por Tabernas el 16, acampando el 17 en Rioja, entrevistándose con las autoridades de Almería. El 20 llega a Santa Fe de Mondújar, donde firmaría el Bando de Reducción de los moriscos. El 21 de abril se traslada a Terque donde continúa entrevistándose con generales moriscos. Desde este lugar envía a Jordán Valdés y Tello González de Aguilar a castigar a los moriscos de Félix. Del 30 de abril al 1 de mayo está en Instinción, acampa el 1 de mayo en Canjáyar, pasando al día siguiente a Padules, realizando la reducción general de los moriscos el 13 de mayo en Fondón. En Padules permaneció hasta el 20 de mayo, pasando hasta Cobda, donde situaría un presidio al que van llegando los moriscos reducidos. En esta localidad permanecería hasta el 1 de agosto, día que abandona el presidio del Andarax, llegando al día siguiente a Guadix, dando por finalizada la campaña. A los pocos días se trasladaría a Granada(18).

6. Rendición de los moriscos

    La primera reunión formal para la rendición de los moriscos se realizó en Fondón de Andarax el 13 de mayo de 1570, a la conferencia acudieron el Habaquí en nombre de Abén Abóo, Hernando de Galipe, Pedro de Mendoza el Hoscení, Alonso de Velasco el Granaíno, Hernando el Gorri y dos turcos principales, protegidos por mil escopeteros. De parte cristiana Alonso de Granada Venegas, los beneficiados Torrijos y Tamarid, Hernán Valle de Palacios y otros caballeros. Los moriscos accedieron a reunirse a cambio de poder permanecer en el reino de Granada con las provisiones anteriores a 1567. Don Juan contestó que trajeran poder de Abén Abóo y que sus peticiones fueran recogidas en un memorial en forma de suplicación(19).
    El 19 de mayo se volvieron a reunir en Fondón, donde los moriscos entregaron los poderes y memoriales a Hernán Valle de Palacios para que se lo entregara al Austria. El acuerdo estipulaba que el Habaquí fuera a pedir misericordia de sus culpas a los pies de don Juan, y se rindiesen armas y banderas, y su majestad daría orden de no ser molestados entregándoles sus mujeres y bienes, pero no en la Alpujarra. Pidiendo además un trato de favor para él, Abén Abóo y los principales de la revuelta.

ABÉN ABÓO
(C) https://es.wikipedia.org/wiki/Aben_Aboo

    El 25 de mayo volvió el Habaquí con los acuerdos firmados, y su compromiso de embarcar a los turcos y berberiscos a Berbería. Este se realizó en junio de 1570; pero la llegada de nuevas tropas hizo que Abén Abóo cambiara de parecer, que unido a la desconfianza y celos que tenía a el Habaquí, y la intención de este de traicionarlo, le llevó a asesinarle en julio(20). Según Pérez de Hita, Abén Abóo le dijo a el Habaquí: “… ¡tú vas allá y negocias por ti, atribuyéndote la honra y gloria del rendimiento de las armas y restauración del reino, y das palabra de llevarme preso o muerto a la presencia de los cristianos!”(21).
    El 30 de julio don Juan envió a Hernán Valle de Palacios a saber lo ocurrido, sabiendo en este momento de la muerte de el Habaquí, el Austria rompió las negociaciones de paz, reanudándose la guerra(20)...

BIBLIOGRAFÍA

(1) La batalla de Palacés: 12 de noviembre de 1569. Palacés Histórico. 2021.
https://palaceshistorico.blogspot.com/2021/07/la-batalla-de-palaces-12-de- noviembre.html
(2) La repoblación de Olula del Río en el siglo XVI. José Domingo Lentisco Puche. Instituto de Estudios Almerienses y Ayuntamiento de Olula del Río. 1991. Página 94.
(3) El II Marqués de los Vélez y la guerra contra los moriscos 1568-1571. Valeriano Sánchez Ramos. Revista Velezana, Ayuntamiento de Vélez Rubio, Centro Virgitano de Estudios Históricos y Ayuntamiento de Berja. 2002. Páginas 179-188.
(4) Guerras civiles de Granada. Ginés Pérez de Hita. Texto preparado por Enrique Suárez Figaredo a partir de la Colección Austral. Madrid. 1975. Página 179.
(5) Ibídem. El II Marqués de los Vélez… Páginas 190-193.
(6) Historia de Zurgena. A la historia desde tu historia. José García Gallego, Josefina Valera Tudela y Pedro Segura Cano. Arráez Editores. Colección Investigación n.º 2. 1994. Páginas 113-115.
(7) La rebelión de los moriscos en tierras almerienses. Carlos Villoria Prieto y Valeriano Sánchez Ramos. Instituto de Estudios Almerienses. Colección Historia n.º 71. 2020. Páginas 57-61.
(8) Ibídem. Guerras civiles de Granada… Páginas 220 y 226.
(9) Ibídem. El II Marqués de los Vélez… Páginas 193-196.
(10) Ibídem. Historia de Zurgena… Páginas 116-117.
(11) Don Juan de Austria en el Almanzora. José Ángel Tapia Garrido. Roel N.º 7-8. 1986/87. Página 156.
(12) Ibídem. Don Juan de Austria… Páginas 160-161.
(13) Historia del rebelión y castigo de los moriscos del reyno de Granada. Tomo II. Luis del Mármol Carvajal. Imprenta de Sancha. 1797. Página 316.
(14) Ibídem. Don Juan de Austria… Página 162.
(15) Ibídem. El II Marqués de los Vélez… Páginas 196.
(16) Ibídem. Don Juan de Austria… Página 163-165.
(17) El valle del Almanzora durante el islam (y Suflí al fondo). José Acosta Montoro. Arráez Editores. Colección Investigación, 5. 1995. Página 227.
(18) Ibídem. El II Marqués de los Vélez… Páginas 194-195.
(19) Ibídem. El valle del Almanzora durante… Página 231-232.
(20) Entre el colaboracionismo y la rebelión: el morisco Hernando el Habaquí. Carlos Javier Garrido García. Miscelánea de estudios árabes y hebraicos. Sección árabe-islam. Vol. 63. 2014. Páginas 60-62.
(21) Ibídem. Guerras civiles de Granada… Página 261.

                        © ANDRÉS SÁNCHEZ DOMÍNGUEZ 2023